La pasión de la detective Jessica Sanchez por su trabajo en la policía le ha traído un regalo envenenado: un multimillonario, agradecido por resolver un caso, le ha dejado en herencia una mansión en Los Ángeles que despierta animadversión en el cuerpo.
Por su parte, Blair Harbour, una célebre cirujana pediátrica que terminó en la cárcel por asesinar a su vecino, tiene otro tipo de sospechas. Tras salir en libertad condicional, lo único que quiere es ver de vez en cuando a su hijo, que tuvo que dar en adopción a una amiga. Para eso, debe mantener su trabajo mediocre y no meterse en líos. Unos objetivos casi inalcanzables cuando en su vida entra en tromba Sneak, una antigua compañera de prisión. Cleptómana y drogadicta, Sneak necesita desesperadamente su ayuda para encontrar a su hija desaparecida. ¿Cómo se la va a negar Blair, si está viva gracias a esa ladrona?