La regidora predica por el desierto del mediodía contra la gran colonia y la servidumbre simbiótica. Visitará Ciudad Avispero, la ciudad de los mil minaretes y de las mil palmeras, la ciudad de los bandidos y la central del comercio para reunir un ejército capaz de doblegar al hijo de las moscas. Sonarán tambores de guerra, arderán los caracoles, se liberará del yugo a todos los pueblos y se reparará dolor con dolor en justa venganza. Esta es la historia de cómo reunimos a las huestes de los pueblos libres para arrasar la gran colonia, de cómo recorrimos el desierto del mediodía en una caravana de escorpiones, en una alfombra voladora, en el Desert Express o surcando las corrientes freáticas que conectan los oasis. Y de la batalla del amanecer eterno, que remató nuestro periplo con gloria y muerte, y que trató de cambiarlo todo para siempre.